Podcasts by Category

Reflexiones diarias Padre Juan Diego Ruiz Arango. Medellín. Colombia.

Reflexiones diarias Padre Juan Diego Ruiz Arango. Medellín. Colombia.

Jose Jaime

Reflexiones diarias de las lecturas por parte del presbítero Juan Diego Ruiz Arango. Todos los días subimos la palabra de Dios y su reflexión.

1114 - Reflexión miércoles 1º de mayo de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.
0:00 / 0:00
1x
  • 1114 - Reflexión miércoles 1º de mayo de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera lectura Hch 15, 1-6 Se decidió que subieran a Jerusalén a consultar a los apóstoles y presbíteros sobre esta controversia Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles. EN aquellos días, unos que bajaron de Judea se pusieron a enseñar a los hermanos que, si no se circuncidaban conforme al uso de Moisés, no podían salvarse. Esto provocó un altercado y una violenta discusión con pablo y Bernabé; y se decidió que Pablo, Bernabé y algunos más de entre ellos subieran a Jerusalén a consultar a los apóstoles y presbíteros sobre esta controversia. Ellos, pues, enviados por la Iglesia provistos de lo necesario, atravesaron Fenicia y Samaría, contando cómo se convertían los gentiles, con lo que causaron gran alegría a todos los hermanos. Al llegar a Jerusalén, fueron acogidos por la Iglesia, los apóstoles y los presbíteros; ellos contaron lo que Dios había hecho con ellos. Pero algunos de la secta de los fariseos, que habían abrazado la fe, se levantaron, diciendo: «Es necesario circuncidarlos y ordenarles que guarden la ley de Moisés». Los apóstoles y los presbíteros se reunieron a examinar el asunto. Palabra de Dios. Salmo Sal 122 (121), 1-2. 3-4a. 4b-5 (R. cf. 1) R. Vamos alegres a la casa del Señor. O bien: R. Aleluya V. ¡Qué alegría cuando me dijeron: «Vamos a la casa del Señor»! Ya están pisando nuestros pies tus umbrales, Jerusalén. R. V. Jerusalén está fundada como ciudad bien compacta. Allá suben las tribus, las tribus del Señor. R. V. Según la costumbre de Israel, a celebrar el nombre del Señor; en ella están los tribunales de justicia, en el palacio de David. R. Aclamación R. Aleluya, aleluya, aleluya. V. Permanezcan en mí, y yo en ustedes -dice el Señor-; el que permanece en mí da fruto abundante. R. Evangelio Jn 15, 1-8 El que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante Lectura del santo Evangelio según san Juan. EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Yo soy la verdadera vid, y mi Padre es el labrador. A todo sarmiento que no da fruto en mí lo arranca, y a todo el que da fruto lo poda, para que dé más fruto. Ustedes ya están limpios por la palabra que les he hablado; permanezcan en mí, y yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante; porque sin mí no pueden hacer nada. Al que no permanece en mí lo tiran fuera, como el sarmiento, y se seca; luego los recogen y los echan al fuego, y arden. Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que desean, y se realizará. Con esto recibe gloria mi Padre, con que den fruto abundante; así serán discípulos míos». Palabra del Señor.

    Wed, 01 May 2024 - 09min
  • 1113 - Reflexión martes 30 de abril de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera lectura Hch 14,19-28 Contaron a la Iglesia lo que Dios había hecho por medio de ellos Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles. EN aquellos días, llegaron unos judíos de Antioquía y de Iconio y se ganaron a la gente; apedrearon a Pablo y lo arrastraron fuera de la ciudad, dándole ya por muerto. Entonces lo rodearon los discípulos; él se levantó y volvió a la ciudad. Al día siguiente, salió con Bernabé para Derbe. Después de predicar el Evangelio en aquella ciudad y de ganar bastantes discípulos, volvieron a Listra, a Iconio y a Antioquía, animando a los discípulos y exhortándolos a perseverar en la fe, diciéndoles que hay que pasar por muchas tribulaciones para entrar en el reino de Dios. En cada Iglesia designaban presbíteros, oraban, ayunaban y los encomendaban al Señor, en quien habían creído. Atravesaron Pisidia y llegaron a Panfilia. Y después de predicar la Palabra en Perge, bajaron a Atalía y allí se embarcaron para Antioquía, de donde los habían encomendado a la gracia de Dios para la misión que acababan de cumplir. Al llegar, reunieron a la Iglesia, les contaron lo que Dios había hecho por medio de ellos y cómo había abierto a los gentiles la puerta de la fe. Se quedaron allí bastante tiempo con los discípulos. Palabra de Dios. Salmo Sal 145(144),10.11-12. 13ab.21 (R. 126[125],5) R. Tus amigos, Señor, proclaman la gloria de tu reinado. O bien: R. Aleluya V. Que todas tus criaturas te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles. Que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañas. R. V. Explicando tus hazañas a los hombres, la gloria y majestad de tu reinado. Tu reinado es un reinado perpetuo, tu gobierno va de edad en edad. R. V. Pronuncie mi boca la alabanza del Señor, todo viviente bendiga su santo nombre por siempre jamás. R. Aclamación R. Aleluya, aleluya, aleluya. V. Era necesario que el Mesías padeciera y resucitara de entre los muertos; y entrara así en su gloria. R. Evangelio Jn 14,27-31a Mi paz les doy Lectura del santo Evangelio según san Juan. EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «La paz les dejo, mi paz les doy; no se la doy yo como la da el mundo. Que no se turbe su corazón ni se acobarde. Me han oído decir: "Me voy y vuelvo al lado de ustedes". Si me amaran, se alegrarían de que vaya al Padre, porque el Padre es mayor que yo. Se lo he dicho ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda crean. Ya no hablaré mucho con ustedes, pues se acerca el príncipe de este mundo; no es que él tenga poder sobre mí, pero es necesario que el mundo comprenda que yo amo al Padre, y que, como el Padre me ha ordenado, así actúo». Palabra del Señor.

    Tue, 30 Apr 2024 - 07min
  • 1112 - Reflexión lunes 29 de abril de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera lectura Hch 14,5-18 Les anunciamos esta Buena Noticia: que dejen los ídolos vanos y se conviertan al Dios vivo Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles. EN aquellos días, cuando en Iconio se produjeron conatos de violencia de parte de los gentiles y de los judíos, con sus autoridades, para maltratar a Pablo y Bernabé y apedrearlos; al darse cuenta de la situación, huyeron a las ciudades de Licaonia, a Listra y Derbe y alrededores, donde se pusieron a predicar el Evangelio. Había en Listra, sentado, un hombre impedido de pies; cojo desde el seno de su madre, nunca había podido andar. Estaba escuchando las palabras de Pablo, y este, fijando en él la vista y viendo que tenía una fe capaz de obtener la salud, le dijo en voz alta: «Levántate, ponte derecho sobre tus pies». El hombre dio un salto y echó a andar. Al ver lo que Pablo había hecho, el gentío exclamó en la lengua de Licaonia: «Los dioses en figura de hombres han bajado a visitarnos». A Bernabé lo llamaban Zeus, y a Pablo, Hermes, porque se encargaba de hablar. El sacerdote del templo de Zeus que estaba a la entrada de la ciudad trajo a las puertas toros y guirnaldas y, con la gente, quería ofrecerles un sacrificio. Al oírlo los apóstoles Bernabé y Pablo, se rasgaron el manto e irrumpieron por medio del gentío, gritando y diciendo: «Hombres. ¿qué hacen ustedes? También nosotros somos humanos de la misma condición de ustedes; les anunciamos esta Buena Noticia: que dejen los ídolos vanos y se conviertan al Dios vivo "que hizo el cielo, la tierra y el mar y todo lo que contienen". En las generaciones pasadas, permitió que cada pueblo anduviera por su camino; aunque no ha dejado de dar testimonio de sí mismo con sus beneficios, mandándoles desde el cielo la lluvia y las cosechas a sus tiempos, dándoles comida y alegría en abundancia». Con estas palabras, a duras penas disuadieron al gentío de que les ofrecieran un sacrificio. Palabra de Dios. Salmo Sal 115(113b),1-2.3-4.15-16 (R. 1) R. No a nosotros, Señor, sino a tu nombre da la gracia. O bien: R. Aleluya V. No a nosotros, Señor, no a nosotros, sino a tu nombre da la gloria, por tu bondad, por tu lealtad. ¿Por qué han de decir las naciones: «Dónde está su Dios»? R. V. Nuestro Dios está en el cielo, lo que quiere lo hace. Sus ídolos, en cambio, son plata y oro, hechura de manos humanas. R. V. Benditos sean el Señor, que hizo el cielo y la tierra. El cielo pertenece al Señor, la tierra se les ha dado a los hombres. R. Aclamación R. Aleluya, aleluya, aleluya. V. El Espíritu Santo será quien se lo eneseñe todo a ustedes y les vaya recordando todo lo que les he dicho. R. Evangelio Jn 14,21-26 El Paráclito, que enviará el Padre, será quien se lo enseñe todo Lectura del santo Evangelio según san Juan. EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «El que acepta mis mandamientos y los guarda, ese me ama; y el que me ama será amado por mi Padre, y yo también lo amaré y me manifestaré a él». Le dijo Judas, no el Iscariote: «Señor, ¿qué ha sucedido para que te reveles a nosotros y no al mundo?». Respondió Jesús y le dijo: «El que me ama guardará mi palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada en él. El que no me ama no guarda mis palabras. Y la palabra que están oyendo no es mía, sino del Padre que me envió. Les he hablado de esto ahora que estoy a su lado, pero el Paráclito, el Espíritu Santo, que enviará el Padre en mi nombre, será quien se lo enseñe todo y les vaya recordando todo lo que les he dicho». Palabra del Señor.

    Mon, 29 Apr 2024 - 08min
  • 1111 - Reflexión Domingo 28 de abril de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera lectura Hch 9,26-31 Él les contó cómo había visto al Señor en el camino Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles. EN aquellos días, llegando Pablo a Jerusalén, trataba de juntarse con los discípulos, pero todos le tenían miedo, porque no se fiaban de que fuera discípulo. Entonces Bernabé, tomándolo consigo, lo presentó a los apóstoles y él les contó cómo en Damasco había actuado valientemente en el nombre de Jesús. Saulo se quedó con ellos y se movía con libertad en Jerusalén, actuando valientemente en el nombre del Señor. Hablaba y discutía también con los helenistas, que se propusieron matarlo. Al enterarse los hermanos, lo bajaron a Cesarea y lo enviaron a Tarso. La Iglesia gozaba de paz en toda Judea, Galilea y Samaría. Se iba construyendo y progresaba en el temor del Señor, y se multiplicaba con el consuelo del Espíritu Santo. Palabra de Dios. Salmo Sal 22(21),26b-27. 28 y 30.31-32 (R. 26a) R. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea. O bien: R. Aleluya. V. Cumpliré mis votos delante de sus fieles. Los desvalidos comerán hasta saciarse, alabarán al Señor los que lo buscan. ¡Viva su corazón por siempre! R. V. Lo recordarán y volverán al Señor hasta de los confines del orbe; en su presencia se postrarán las familias de los pueblos. Ante él se postrarán los que duermen en la tierra, ante él se inclinarán los que bajan al polvo. R. V. Mi descendencia lo servirá; hablarán del Señor a la generación futura, contarán su justicia al pueblo que ha de nacer: «Todo lo que hizo el Señor». R. Segunda lectura 1Jn 3,18-24 Este es su mandamiento: que creamos y que nos amemos Lectura de la primera carta del apóstol san Juan. HIJOS míos, no amemos de palabra y de boca, sino de verdad y con obras. En esto conoceremos que somos de la verdad y tranquilizaremos nuestro corazón ante él, en caso de que nos condene nuestro corazón, pues Dios es mayor que nuestro corazón y lo conoce todo. Queridos, si el corazón no nos condena, tenemos plena confianza ante Dios. Cuanto pidamos lo recibiremos de él, porque guardamos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada. Y este es su mandamiento: que creamos en el nombre de su Hijo, Jesucristo, y que nos amemos unos a otros, tal como nos lo mandó. Quien guarda sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él; en esto conocemos que permanece en nosotros: por el Espíritu que nos dio. Palabra de Dios. Aclamación R. Aleluya, aleluya, aleluya. V. Permanezcan en mí, y yo en ustedes -dice el Señor-; el que permanece en mí da fruto abundante. R. Evangelio Jn 15,1-8 El que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante Lectura del santo Evangelio según san Juan. EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Yo soy la verdadera vid, y mi Padre es el labrador. A todo sarmiento que no da fruto en mí lo arranca, y a todo el que da fruto lo poda, para que dé más fruto. Ustedes ya están limpios por la palabra que les he hablado; permanezcan en mí, y yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante; porque sin mí no pueden hacer nada. Al que no permanece en mí lo tiran fuera, como el sarmiento, y se seca; luego los recogen y los echan al fuego, y arden. Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que desean, y se realizará. Con esto recibe gloria mi Padre, con que den fruto abundante; así serán discípulos míos». Palabra del Señor.

    Sun, 28 Apr 2024 - 07min
  • 1110 - Reflexión sábado 27 de abril de 2024. Padre Juan Diego Ruiz Arango.

    Primera lectura Hch 13,44-52 Sepan que nos dedicamos a los gentiles Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles. EL sábado siguiente, casi toda la ciudad acudió a oír la palabra del Señor. Al ver el gentío, los judíos se llenaron de envidia y respondían con blasfemias a las palabras de Pablo. Entonces Pablo y Bernabé dijeron con toda valentía: «Teníamos que anunciarles primero a ustedes la palabra de Dios; pero como la rechazan y no se consideran dignos de la vida eterna, sepan que nos dedicamos a los gentiles. Así nos lo ha mandado el Señor: "Yo te he puesto como luz de los gentiles, para que lleves la salvación hasta el cofín de la tierra"». Cuando los gentiles oyeron esto, se alegraron y alababan la palabra del Señor; y creyeron los que estaban destinados a la vida eterna. La palabra del Señor se iba difundiendo por toda la región. Pero los judíos incitaron a las señoras distinguidas, adoradoras de Dios, y a los principales de la ciudad, provocaron una persecución contra Pablo y Bernabé y los expulsaron de su territorio. Estos sacudieron el polvo de los pies contra ellos y se fueron a Iconio. Los discípulos, por su parte, quedaban llenos de alegría y de Espíritu Santo. Palabra de Dios. Salmo Sal 98(97),1.2-3ab.3cd-4 (R. 3cd) R. Los confines de la tierra han contemplado la salvación de nuestro Dios. O bien: R. Aleluya V. Canten al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas. Su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. R. V. El Señor da a conocer su salvación, revela a las naciones su justicia. Se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R. V. Los confines de la tierra han contemplado la salvación de nuestro Dios. Aclama al Señor, tierra entera; griten, vitoreen, toquen. R. Aclamación R. Aleluya, aleluya, aleluya V. Si permanecen en mi palabra -dice el Señor-, serán de verdad discípulos míos, y conocerán la verdad. R. Evangelio Jn 14,7-14 Quien me ha visto a mí ha visto el Padre Lectura del santo Evangelio según san Juan. EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Si me conocieran a mí, conocerían también a mi Padre. Ahora ya lo conocen y lo han visto». Felipe le dice: «Señor, muéstranos al Padre y nos basta». Jesús le replica: «Hace tanto que estoy con ustedes, ¿y no me conoces, Felipe? Quien me ha visto a mí ha visto al Padre. ¿Cómo dices tú: "Muéstranos al Padre"? ¿No crees que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Lo que yo les digo no lo hablo por cuenta propia. El Padre, que permanece en mí, él mismo hace las obras. Créanme: yo estoy en el Padre y el Padre en mí. Si no, crean a las obras. En verdad, en verdad les digo: el que cree en mí, también él hará las obras que yo hago, y aun mayores, porque yo me voy al Padre. Y lo que pidan en mi nombre, yo lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si me piden algo en mi nombre, yo lo haré». Palabra del Señor.

    Sat, 27 Apr 2024 - 07min
Show More Episodes